Foto: Wimbledon
Existen algunas dudas que surgen mientras disfrutamos de un partido de tenis, en ocasiones tenemos que recurrir a un experto o consultar en la web para obtener las respuestas. Una de estas preguntas tan común como misteriosa es, ¿Por qué se cambian las pelotas cada nueve juegos durante los partidos?
Recordemos que antiguamente las pelotas estaban hechas de cuero y se rellenaban con cabello humano, algo que resultaba espeluznante. Pero hoy, las pelotas están hechas de caucho proveniente de árboles que luego de pasar por un proceso de vulcanización en el que se les añaden químicos y se les recubre con una tela de nailon mezclada con lana de oveja, son empacadas en recipientes herméticamente preparados para que no pierdan la presión antes de ponerlas en uso.
Cuando se inicia el precalentamiento antes de cada partido se habla de que ese peloteo es equivalente a competir durante dos juegos, es decir, que el primer cambio de pelotas se hace después del séptimo juego durante el partido y posteriormente se hace cada nueve juegos debido a que luego de ese tiempo las pelotas empiezan a sufrir ligeras deformaciones en la superficie y pérdidas de presión que generan algunos cambios en los rebotes. No en vano se fabrican más de 30 millones de pelotas al año en todo el mundo.
La dedicación y rigurosidad en la fabricación de las pelotas como en otros detalles son vitales para que el deporte individual más popular del mundo esté siempre a la vanguardia.