Las dos caras de Nick Kyrgios

Foto: ATP

A lo largo de su carrera, desde sus inicios Kyrgios siempre ha dado que hablar por sus actitudes y conductas dentro de las canchas de tenis. Jugadas displicentes, abusos verbales para con el jugador rival y hasta con el público lo han catalogado como el «Bad Boy» del circuito ATP.

Tanto en 2015, 2016 y 2017 fue noticia en el mundo tenis, pero no por sus virtudes técnicas ni sus impresionantes victorias que mantiene ante Djokovic, Nadal o Federer, sino por conductas antideportivas.

Nick hace ya más de dos años hizo un comentario desafortunado en el duelo ante Stan Wawrinka por los octavos de final del ATP Masters 1000 de Montreal. Dicho comentario hacía referencia a que su amigo y compatriota Thanasi Kokkinakis se había acostado con la novia del suizo. El suceso derivó en una multa de 10mil dólares.

En estos últimos años en Shanghai tampoco pasó desapercibido. El de Canberra fue multado en las dos más recientes ediciones del certamen asiático por literalmente tirar el partido con muy poco esfuerzo lo cual le propinó en 2016 una suspensión de ocho semanas y una multa de 25mil dólares.

Mientras que en 2017, Kyrgios abandonó su partido tras concluir el primer set sin motivo alguno por el cual, no solo se le quitó el premio por disputar la primera ronda, sino que también tuvo otros 10mil dólares de multa.

En medio de todo esto hay otro chico australiano escondido. El Nick desde dentro de la cancha dista mucho del que está afuera ya que ha hecho varios actos benéficos. Uno de ellos fue este año tras el huracán María de Puerto Rico, el australiano donó como caridad 50 dólares por ace en el circuito. También lo hizo en 2015 para la fundación Elena Baltacha Foundation.

Al margen de todo esto, Kyrgios inició su propia fundación la NK Foundation en la cual se busca mejorar el acceso y la construcción de instalaciones deportivas para jóvenes en riesgo de exclusión y sin recursos.

De hecho recientemente tras su exhibición junto con Juan Martín Del Potro en Buenos Aires donó 100.000 dólares directo a su fundación.

Kyrgios destacó en una entrevista en la web australiana player voice que: «Estamos buscando un buen terreno en Melbourne y también contactando con organizaciones, y posibles colaboradores». » «El sueño está empezando a ser una realidad» finalizó.

Además afirma que lo hace desde el corazón y que ahora tiene una razón más para competir: » Me sentiría muy vacío si compitiera solo por dinero, ahora juego por esos niños que puedo ayudar» concluyó