Dimitrov obtiene su primer Masters en Cincinnati

La década de los 90 arribó a la Cancha Central del Masters 1000 de Cincinnati. Y no precisamente aquella caracterizada por Agassi y Sampras, sino por aquellos nacidos en aquel tiempo, que habían estado ausentes en los grandes escenarios del deporte blanco.

Foto: W & S Open

Grigor Dimitrov y Nick Kyrgios aprovecharon la gran cantidad de ausencias en el cuadro principal para llegar a la final, aunado al  gran nivel que mostraron durante toda la semana. Había dos caras nuevas en una final de ésta índole por primera vez en cinco años. Ante la ausencia de figuras como las de Roger, Rafa, Novak y Andy, la frescura de una generación que no terminaba de emerger, comenzó a arribar en Cincinnati.

Las dos posiciones fuera del top 10 que aparecieron en la pista no se reflejaron con el nivel mostrado durante el partido. El búlgaro y el australiano sostuvieron un duelo de derechas que en todo momento encontraron profundidad, y colocación. Además, dos servicios que fungían como el principal factor en cada juego, de ahí la alta efectividad de puntos ganados con el primer saque de ambos jugadores.

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Dimitrov inició sacando en el partido. El quiebre en el sexto juego le dio una ventaja que cada vez parecía más grande en relación a lo mostrado por Kyrgios. Grigor se mantendría fiel a su estilo, condicionando los puntos con su servicio y dominando en los intercambios. Cerró 6-3 el primer parcial.

El búlgaro no perdió la concentración. A Kyrgios parecía costarle cada vez más el mantenerse al borde del partido. El juego completo del ahora campeón terminaba por frustrar al australiano, que incluso improvisaba con subidas a la red que terminaban en un passing de Dimitrov. En el onceavo juego, el servicio de Nick volvió a colapsar y Grigor se encontró con la oportunidad de servir para campeonato.

La superioridad del búlgaro encontró su tope con un punto espectacular que le dio un doble match point. La primera oportunidad fue desaprovechada pero Dimitrov no se dio el lujo de llegar a un nuevo deuce en el partido. La pelota de Kyrgios se detuvo en la red y finalmente llegó el primer Masters 1000 para Grigor.

El mejor Dimitrov tardó en llegar pero al fin lo hizo. Aquel que comenzó a explotar en Australia, cuando quedó eliminado por muy poco a manos de Rafael Nadal. Esta vez mostró pocas debilidades y se confirmó como el mejor del certamen. Grigor, lejos de ser una promesa a esta edad, apuesta por consolidarse como el presente continuo del tenis.