Tomás Etcheverry, cumpliendo el sueño

Foto/autor: Etcheverry con su cartel de motivación

El sueño de un niño es el que está viviendo Tommy Etcheverry, del cual no quiere despertar. Desde que lo tenía en un poster, luego en un cartel cuando gano su primer punto en el circuito en el ITF de Ecuador hace 7 años. En dicho cartel el platense mostraba con orgullo su primer punto y hacía referencia que Djokovic tenía en ese momento 12900 puntos. Tenía apenas 17 años, a medida que fue ganando partidos se fue “achicando” ese margen, hasta el día de hoy de encontrarse a su ídolo Novak Djokovic, en tercera ronda del Abierto de Australia en cancha central A medida que se fue enrolando en el circuito fue accediendo a finales como en Santiago y la brecha se fue acortando. Ya en ese momento poseía 714 puntos y decía: “Faltan 7706”. El diestro argentino mencionó en mayo pasado su satisfacción de enfrentar por primera vez al serbio en la segunda ronda del Masters de Roma: “Jugar con Nole es un sueño hecho realidad. Algo que siempre quise, tenía muchas ganas”.¿De quién fue la idea de mantener viva esa brecha? De su entrenador, en ese momento Luciano Cabeiro no encontró mejor manera de motivarlo para mostrarle que estaba para cosas grandes. El platense busca llegar a la segunda semana de un major por segunda vez en su carrera, ya lo hizo el año pasado en Roland Garros cuando cayó en cuartos de final frente a Alexander Zverev. El último argentino en llegar a los octavos de final en Australia fue Diego Schwartzmann en el 2020 cuando cayó justamente frente a Novak Djokovic en sets corridos.

No es descabellado pensar que Etcheverry puede presentar un problema para Djokovic, dado los antecedentes en el torneo. Viene sólido con su saque y con su derecha, sin ceder sets frente a Murray y Monfils. Es la primera cita entre ambos en partidos a 5 sets, previamente se encontraron en los Masters de Roma y París, con victorias en parciales seguidos para el serbio. Hoy, el respeto y admiración del serbio hacia Tommy es algo que no pasa desapercibido: “Está jugando el mejor tenis de su vida en cancha rápida. Somos buenos amigos adentro y fuera de la cancha, pero en la cancha es otra cosa, somos rivales. Le deseo lo mejor, excepto mañana por la noche”