
En un giro inesperado que conmocionó al mundo del tenis, Novak Djokovic se vio obligado a retirarse de la semifinal del Abierto de Australia debido a una lesión en la pierna izquierda. El tenista serbio, que buscaba su undécimo título en Melbourne Park, no pudo continuar después de perder el primer set ante Alexander Zverev.
La decisión de Djokovic de retirarse fue recibida con una mezcla de aplausos y abucheos por parte del público presente en el Rod Laver Arena. Mientras algunos reconocieron el esfuerzo del tenista a pesar de la lesión, otros expresaron su frustración por no poder presenciar un partido completo.
La lesión de Djokovic se produjo durante su victoria en cuartos de final ante Carlos Alcaraz. A pesar de las molestias, el serbio logró avanzar a la siguiente ronda, pero la intensidad del partido y el desgaste físico acabaron pasando factura.
En conferencia de prensa, Djokovic reconoció que el dolor era insoportable y que no tenía las condiciones físicas necesarias para continuar el partido. «Sabía que incluso si ganaba el primer set, iba a ser una batalla cuesta arriba para mí», admitió el tenista serbio.
La retirada de Djokovic ha generado un gran debate tanto dentro como fuera de las pistas de tenis. Muchos aficionados lamentan la ausencia del tenista en la final y cuestionan si esta lesión podría marcar el comienzo del fin de su carrera. Sin embargo, Djokovic aseguró que seguirá luchando por más títulos y que no se rendirá a pesar de las adversidades.
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