Con 33 años, Gilles Muller había alcanzado cinco finales ATP, pero jamás había conseguido alzarse con un trofeo. El ATP 250 de Sydney fue el indicado para que el luxemburgués rompiera con esa maldición y se coronara por primera vez luego de vencer a Daniel Evans.
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El primer set fue clave para que el partido se decantara para el lado de Muller. Se trató de un parcial muy parejo en el que nadie logró romper el servicio de su rival, por lo que la definición se estiró hasta el tie-break. En esa instancia, Muller impuso su experiencia y sus poderosos golpes para triunfar por 7-5.
Con la ventaja en el bolsillo, Muller se soltó aún más y Evans comenzó a fallar, haciendo que la definición fuera mucho más cómoda. Un claro 6-2 a favor del sexto preclasificado le permitió sacarse la espina y obtener su primer título en la categoría ATP.
La semana previa al primer Grand Slam del año terminó siendo muy positiva para ambos finalistas. Lógicamente, Muller llegará con la confianza al máximo luego de coronarse por primera vez, pero la situación es similar para Evans, quien tuvo un excelente certamen en el que venció, por ejemplo, a Dominic Thiem y alcanzó su primera definición ATP.
Por: Juan Amor (@juambaa)