Schwarztman: el “pitufo” con la mejor devolución de la temporada

Cuando hablamos de tenistas argentinos en el circuito de la ATP nos hemos acostumbrado al nombre de Juan Martín Del Potro. Y no merece la pena abundar en explicaciones: se lo ha ganado. Pero durante el 2017, hay alguien que también viene siendo protagonista de más de un titular. Ese no es otro que Diego Schwartzman, el pequeño que hace cosas de gigantes. ¿Será este año el de su afianzamiento y el que viene el del despegue hacia lo más alto?

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El nacido en Buenos Aires viene cumpliendo con creces la primera parte de la pregunta del párrafo anterior: 33 victorias, 25 derrotas, cuartos de final en US Open, Montreal, Montecarlo y semifinales en Tokio. Además, derrotó a jugadores de la talla de Marin Cilic, Lucas Pouille, Dominic Thiem, Roberto Bautista Agut, Bernard Tomic y David Ferrer, mientras que tuvo contra las cuerdas a Novak Djokovic en Roland Garros (perdió en cinco sets).

Existe un ítem en donde, por el momento, no tiene rival: la altura. Es el jugador más bajito del top 100, gracias a sus 170 centímetros. Pero ya lo dijo él: “Espero que la gente entienda que el tenis es para todo el mundo, no sólo para los altos”. La posible falta de potencia en algunos golpes (en comparación con jugadores más altos) es reemplazada con una increíble fortaleza mental.

“Sé que soy muy fuerte de la cabeza, desde chico que trato de hacerlo. Siempre supe que es una clave en el tenis”, expresó “Peque”. A contrapunto de Del Potro, luego de terminar con Sebastián Prieto, en agosto del año pasado él se la jugó con un novato como entrenador: Juan Ignacio Chela. Con la colaboración de Leonardo Olguín en algunos momentos, Schwartzman no sólo se afianzó en el top 100 en 2017 sino que logró el ránking más alto de su carrera: 26°.

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“¿Qué aporta Chela? Un poco de todo, creo que sus experiencias como jugador son muy buenas para mí, sabe bien lo que tengo que hacer dentro y fuera de la cancha. Venimos trabajando bien”, destacó el bonaerense a la página de la ATP. “La verdad es que nos llevamos muy bien y conectamos mucho. Los dos somos muy relajados pero tenemos las cosas muy claras. Esperemos que todavía esté lejos de su techo”, comentó “Chelita”.

Pero lo mental por sí solo no gana partidos, como tampoco lo hace la potencia: hay que tener talento. Schwartzman es el líder del ítem “Devoluciones” según la ATP, por sobre Murray, Djokovic, Dzumhur y Nadal. Nada mal para el pequeño. “¿Por qué tengo esa virtud? Creo que porque soy bajito y tuve que aprender a devolver bien, porque si no, no podía jugar al tenis. Mi fuerte es devolver, es lo que mejor hago”, comentó Diego luego de vencer a Albert Ramos en Madrid.

¿Cuál es el techo de Diego Schwartzman? ¿Será 2018 el año de su despegue hacia la cima? Por lo pronto, “Peque” nos demostró que, a pesar de las limitaciones físicas y de ser un “pitufo” en medio de tanto jugador tamaño NBA, tiene talento y mentalidad de sobra para hacerse un lugar ultra competitivo mundo ATP y que no parezca una casualidad. Como tampoco empiezan a ser los titulares que llevan su nombre en grande.