La importancia de Nicolás Massú en la carrera de Dominic Thiem

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Nicolás Massú empezó a entrenar a Dominic Thiemen febrero del 2019. A partir de ese entonces, la carrera del austríaco mejoró considerablemente y comenzó a complicar al Big Three.

Para enero del 2019, el actual campeón del US Open se encontraba en el puesto 8 del Ranking ATPcon un rendimiento irregular en los últimos años. Por esta razón, decidió prescindir de los servicios de Günter Bresnik, su primer y único entrenador hasta ese momento. Decidió contratar al ex número 9 del mundo, y no se equivocó.

Desde la llegada del chileno, el europeo logró obtener los mejores resultados de su carrera. Al mes de la llegada de su nuevo entrenador, logró su primer Masters 1000 en Indian Wells venciendo al suizo Roger Federer. En mayo llegó a su segunda final de Grand Slam, perdiendo ante Rafael Nadal en cuatro sets.

“Él realmente ha hecho grandes cambios en mi juego, grandes adiciones. De alguna manera hizo mi juego más impredecible. Mejoramos juntos el juego en la red, mi saque. Mejoramos mi juego en superficies rápidas”, explicaba el nacido en Austria.

A finales del mismo año, obtuvo el ATP 500 disputado en Viena y alcanzó por primera vez en su carrera a disputar la final del ATP Finals, perdiendo ante el griego Stefanos Tsitsipas.

Este año, el “Príncipe de la Tierra” llegó a su tercer final de Grand Slam en el Abierto de Australia. Allí perdió ante el serbio Novak Djokovic en cinco sets.Este resultado le permitió lograr su mejor posición en el Ranking (N°3). En agosto obtuvo su primer “Título Grande”, el US Open, al vencer al alemán Alexander Zverev.

Sin dudas, la aparición de Massú fue un gran acierto por parte de Thiem. Logró que sea el jugador que más partido ganó (14) ante el Big Three desde principios de 2019. Además, consiguió mejorar su juego no solo en polvo de ladrillo, sino también en canchas rápidas.