Kyrgios buscará ser profeta en su tierra

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Venir de atrás comienza a ser una especialidad para Nick Kyrgios. Por tercera ocasión en el torneo, el australiano tuvo que remontar su partido para resultar victorioso; en esta ocasión, lo logró frente a Grigor Dimitrov, el actual campeón defensor del certamen. La tercera fue la vencida para el Bad Boy del tenis, quien no había logrado vencer al búlgaro en sus dos enfrentamientos previos.

Dimitrov inició rayando la perfección. Rompió el saque de Kyrgios y nunca puso en riesgo su servicio. De esta manera, el búlgaro se aseguró el primer parcial por 6-3 y se colocó a un paso de una nueva final. No obstante, el australiano identificó que era momento de cambiar de plan; Nick comenzó alternó los ritmos y los efectos en el segundo parcial, en el cual tuvo una notable mejoría, suficiente para llevarse la manga por 6-1.

Con el partido igualado, apareció de nueva cuenta el tercer set definitivo. De nueva cuenta, un solo break fue necesario para definir la manga y, en este caso, el partido. Kyrgios logró mantener su servicio en todo momento, no así Dimitrov. Después del 6-4 final, Nick aseguró su primera final en casa.

Kyrgios enfrentará a Ryan Harrison en la final. El estadounidense fungió como aguafiestas, al evitar una final entre dos australianos, ya que terminó imponiéndose ante la joven revelación Alex de Minaur. El joven de 18 años había dado el batacazo ante Milos Raonic y también había vencido a Steve Johnson y Michael Mmoh, sin embargo, no pudo ante el tercer norteamericano que enfrentó. El número 47 del mundo terminó como ganador luego de remontar un partido que terminó con parciales de 4-6, 7-6(5) y 6-4.

Nick firmó la séptima final de su carrera, mientras que Harrison llegará apenas a su tercera. Kyrgios buscará ser el primer australiano en ganar el torneo de Brisbane desde que Lleyton Hewitt venciera a Roger Federer en la final del torneo en 2014.